Artículo 11: los partidos oficiales se jugarán en los campos de juego inscriptos por los equipos participantes y que hayan sido aceptados por los CCM y CCF.
Artículo 12: la superficie del terreno de juego deberá ser regularmente plana y su piso será de tierra compacta y preferiblemente cubierta de zacate que esté bien recortado y que ofrezca las condiciones para jugar rugby. No será admitido ningún campo de juego con superficie irregular, pedregosa, excesivamente dura o con grietas que perjudiquen el desarrollo normal del juego o que constituyan un riesgo para los jugadores. Para la demarcación del terreno se utilizará pintura blanca.
Artículo 13: el campo de juego será de forma rectangular y tendrá preferiblemente las dimensiones determinadas por el IRB.
Artículo 14: el campo de juego debe estar marcado 30 minutos antes de la hora fijada para la iniciación del partido. El incumplimiento a lo establecido en los artículos 11, 12 y 13 se sancionará con la pérdida de puntos por parte del equipo local, con un marcador en su contra de 0-28(cuatro tries convertidos) más el correspondiente punto bonus. Si el equipo visitante acepta jugar el partido a pesar del incumplimiento manifiesto de alguna de las normas enumeradas anteriormente, no podrá efectuar ningún reclamo posterior basado en esos incumplimientos.
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